Las perlas de vidrio se descomponen a un ritmo lento y pueden sobrevivir a múltiples impactos. Esto permite un reciclado continuo y un tiempo de granallado más prolongado. Las perlas de vidrio son químicamente inertes y no dejarán ningún residuo en la superficie de la pieza de trabajo.
El granallado con microesferas de vidrio permite al usuario limpiar las piezas de trabajo rápidamente sin eliminar metal de manera significativa. Gracias a la forma de las microesferas de vidrio, limpian, acaban, granallan y desbarban. Este proceso de cuatro pasos proporciona un acabado de superficie controlado, único y limpio.
Las perlas de vidrio se pueden utilizar en muchas aplicaciones de granallado. También son una excelente opción para el acabado cosmético de superficies.