Las perlas de vidrio son un medio filtrante sostenible y respetuoso con el medio ambiente que ofrece un menor consumo de agua, productos químicos y energía.
Gracias a su forma geométrica redondeada y al lecho filtrante homogéneo resultante, las perlas de vidrio tienen unas propiedades de filtración excelentes. En la construcción moderna de pozos de agua, las perlas de vidrio se utilizan desde hace mucho tiempo como material de soporte de los pozos para la extracción de agua potable. Pero, además de en los pozos de agua potable, las perlas de vidrio también son muy útiles en los sistemas de filtración para el tratamiento y la recuperación de agua. Muchas instalaciones en piscinas privadas y públicas, así como en grandes plantas industriales, lo han demostrado ampliamente.
Bien redondeado
Las ventajas de las perlas de vidrio frente a la arena como medio filtrante son evidentes: gracias a su alta densidad, el vidrio filtra incluso las partículas más pequeñas del agua, al igual que la arena. Sin embargo, las perlas de vidrio no se pegan, no se apelmazan ni forman canales y son fáciles de limpiar mecánicamente mediante un lavado a contracorriente del filtro. Esto permite un uso más económico de los productos de mantenimiento. Además, como el vidrio tiene una estructura más abierta, también se puede reducir considerablemente la potencia de bombeo. De este modo, la cantidad de medio filtrante utilizado se puede reducir hasta en un 25 %. Al mismo tiempo, la duración mucho más corta del lavado a contracorriente reduce drásticamente las necesidades de agua y energía.